El juez César Solazzi sostuvo la acusación por el delito de homicidio simple con dolo eventual y ordenó que continuara privado de la libertad el imputado.
El fiscal Fernando Pertierra procesó al conductor de la moto por la calificación de homicidio simple con dolo eventual que mantuvo el juez de Garantías.
LA OPINIONEn las últimas horas, el titular del Juzgado de Garantías N.º 1, César Solazzi, resolvió hacer lugar al pedido de prisión preventiva solicitado por el fiscal Fernando Pertierra y ordenó que Maximiliano Gastón González continúe privado de su libertad mientras avanza la causa en su contra por la trágica muerte de Marcos Gabriel Gorbarán, ocurrida el pasado 29 de marzo en el terraplén del Arroyo Pergamino.
La resolución judicial coincide plenamente con el planteo realizado por el fiscal Fernando Pertierra, quien había solicitado esta medida por considerar que González actuó con un desprecio total por la vida ajena, conduciendo una motocicleta a gran velocidad, sin casco y bajo efectos del alcohol, por una zona peatonal y de uso recreativo, generando un riesgo que terminó costándole la vida a un joven vecino de la ciudad.
El juez Solazzi valoró los argumentos esgrimidos por la Fiscalía y las pruebas colectadas, en tanto calificó el hecho como homicidio con dolo eventual, es decir, cuando alguien se representa que su conducta puede causar una muerte y aun así decide seguir adelante. A esta figura penal se le sumó la imputación por omisión de auxilio, ya que González, en lugar de quedarse a asistir a la víctima tras el impacto, escapó del lugar llevándose la moto de tiro junto a su acompañante.
En su resolución, el magistrado destacó la solidez del material probatorio: los videos del Centro de Monitoreo, los informes periciales, las declaraciones de testigos y las cámaras que captaron el momento en que González acelera y realiza maniobras peligrosas, a pesar de que sabía que podía cruzarse con peatones en el trayecto. Según el expediente, la moto circulaba a una velocidad mínima de 42 km/h en un área exclusivamente peatonal y con visibilidad reducida, lo que volvió inevitable el impacto.
También se consideraron los antecedentes del imputado, su falta de trabajo estable, y el riesgo de fuga evidenciado en su comportamiento posterior al hecho: escapó, se negó a brindar asistencia y fue interceptado por personal policial cuando intentaba huir por avenida Rocha. Todo esto contribuyó a que el juez entendiera que mantener a González en libertad podría poner en riesgo el proceso judicial.
Desde la Fiscalía destacaron el acompañamiento de la Justicia en una investigación que exigió un fuerte trabajo del equipo técnico y jurídico. “Esta resolución representa un respaldo a la tarea diaria del Ministerio Público y, sobre todo, un mensaje de justicia para la familia de la víctima”, expresaron fuentes del caso.
Con la prisión preventiva ya decretada, la causa continúa ahora su camino hacia el juicio oral. El objetivo es que la muerte de Marcos Gorbarán no quede impune y que se juzgue con toda la firmeza que la ley permite un hecho que sacudió a toda la comunidad pergaminense.