Lado B es un innovador taller de teatro anual dirigido a adultos mayores de 21 años que se divide en dos grupos. Por un lado, el Espacio Fuego, destinado a alumnos con experiencia previa en teatro. Por el otro, el Espacio Agua, pensado para quienes quieren iniciarse en la actuación.
Con encuentros semanales que tienen una duración aproximada de dos horas, Lautaro Medina Carrara buscar darle a su taller un enfoque que va más allá de la mera interpretación teatral. El propósito central de Lado B es utilizar al teatro como una herramienta para reconocer y gestionar emociones. No se busca únicamente la formación actoral, sino el autoconocimiento y la conexión con las propias experiencias.
El origen de Lado B
Lautaro estudió en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, en la Universidad Nacional de las Artes, donde se recibió como actor en el año 2021. En 2022 comenzó a ejercer como docente en la sala del GAE junto a Marta Lere, Martín Lencina y Luciana Cruz. Pero, a partir de este año, decidió emprender su propio camino con Lado B, ofreciendo una perspectiva única sobre el teatro.
En diálogo con LA OPINIÓN, el actor pergaminense de 25 años cuenta que "con Lado B busco ofrecer un proceso de aprendizaje individualizado, en el que cada participante tenga la oportunidad de tener su propio proceso".
La metodología del taller
Dentro del mes, algunas clases se enfocan en el juego, mientras que una en particular está destinada a trabajar emociones en profundidad. "En esa clase, que se da una vez al mes y suele ser más intensa, los alumnos son llevados a situaciones incómodas con el fin de potenciar su expresividad y autoconocimiento", expresa Lautaro.
¿Cómo surge Lado B?
El proyecto nace de una reflexión personal del actor, que además se inspiró en las palabras de sus alumnos que veían al teatro como un espacio para liberarse de máscaras. Esta idea lo llevó a cuestionar la relación entre la actuación y la autenticidad, preguntándose si, al subir al escenario los actores dejan de ser ellos mismos.
"Me tocó hacer un monólogo que me representaba al 100% y ahí surgió esa inquietud. Por eso propongo esta mirada de explorar la diferencia entre actuar y mentir, que fue fundamental para mi crecimiento tanto como actor como persona", asegura Lautaro.
Este enfoque hace que cada clase sea un desafío, tanto para los alumnos como para el propio docente que manifiesta que "Lado B soy yo con mis brazos y mi corazón abierto".
Un espacio único para el crecimiento personal
Lo que propone Lautaro no es solo un taller de teatro sino también un espacio de exploración personal con el que, según cuenta, "los alumnos se han mostrado entusiasmados con la propuesta, destacando el ambiente de confianza y compromiso que se genera en cada clase".
Un valioso consejo que marcó el rumbo de su vida
Con nostalgia y emoción, Medina Carrara reconoce que "el consejo más valioso que recibí en mi carrera como actor fue que, hagas lo que hagas, siempre tenés que ser vos mismo" y confiesa que "darme cuenta de que estaba actuando en la vida cotidiana mientras que arriba del escenario era yo mismo, me cambió la mirada. Ahí surgió este taller".
Con esta visión, Lado B invita a quienes buscan explorar sus emociones, desafiar sus propios límites y conectar con ellos mismos a través del teatro en un espacio cómodo y libre, donde cada persona pueda quitarse la máscara y amigarse con su verdadera esencia.