En el marco de la novena de Sor Dulzura, LA OPINION cuenta la historia de este joven creyente que difunde la vida y obra de la beata.
El joven Gael en la Capilla Nuestra Señora del Huerto, donde descansan los restos de María Crescencia.
GAEL MAJLUFEn un mundo marcado por el vértigo, las pantallas y el individualismo, la historia de Gael Majluf sorprende, emociona y despierta admiración. Tiene solo 14 años, pero su vida tiene un propósito muy claro: dar a conocer la vida y obra de María Crescencia Pérez, la beata nacida en Pergamino cuya figura lo acompañó desde muy pequeño, pero con quien tuvo un verdadero encuentro espiritual en 2023.
“Desde muy chiquito me regalaron estampas, objetos y biografías de diferentes santos. Por la cercanía que hay entre Ferré y Pergamino, conocí a Crescencia en 2023. Tuve un encuentro con la hermana Josefina, que me dio materiales que pude llevar a mi pueblo. Así empecé a conocer más de ella y a contar su historia”, relata Gael.
Ese fue solo el comienzo. Movido por la dulzura y la humildad de la beata, creó una cuenta de Instagram llamada @sor_dulzura_2023, que ya reúne a casi 400 seguidores. Desde allí, difunde su mensaje, comparte frases, datos, oraciones y testimonios, convirtiéndose en un joven misionero digital que predica desde la fe y la ternura.
“Lo que más me llamó la atención de Crescencia fue su dulzura, su humildad, su entrega. Podemos imitar su simpleza y su fidelidad a la voluntad de Dios, que vivía a rajatabla”, asegura con convicción.
Pero su compromiso no termina ahí. Gael colecciona documentos, estampas y reliquias relacionadas con Crescencia. Él mismo confecciona pequeñas estampitas que contienen fragmentos de tela que han tocado la tumba de la beata, e incluso retazos que estuvieron en contacto con sus restos. Estas reliquias las distribuye a personas enfermas o que atraviesan momentos difíciles, convencido de que el poder de la oración y la intercesión puede obrar milagros.
“Siento una comunicación especial con ella, un constante acercamiento a través de la oración”, confiesa.
En medio de la novena que la comunidad pergaminense celebra cada año en honor a la beata, la historia de Gael se convierte en una luz distinta, una voz nueva que reafirma el legado de Crescencia desde la mirada de una nueva generación. No es un adulto, ni un religioso: es un adolescente que encontró en esta mujer santa un camino, una causa, un modo de vivir la fe.
“Evangelizar con chicos de mi edad es complicado, pero hay que predicar con el ejemplo”, reflexiona, dejando en claro que su misión no busca imponer sino contagiar, no adoctrinar sino inspirar.
Gael se ha ganado el cariño de su comunidad, y su compromiso ya trascendió los límites de Ferré. Muchos lo consideran un pequeño apóstol, alguien que, con su dulzura y constancia, recuerda que la fe no tiene edad y que la santidad se vive en lo cotidiano.
Por estos días, continúa el tiempo de preparación con vistas a las fiestas patronales, por ello este domingo y lunes, a las 17:45 se rezará el Santo Rosario y luego la celebración de la misa.
El martes, día en que se conmemora la fiesta litúrgica de la beata, la procesión partirá a las 15:30 desde el Hogar de Jesús, recorriendo las calles del centro hasta llegar a la Capilla del Colegio del Huerto. Allí, el obispo de la Diócesis de San Nicolás, monseñor Hugo Santiago, presidirá la misa central a las 16:00.