Durante una bajante del río en San Pedro, un pescador turístico encontró una vértebra fosilizada de ballena que data de la última ingresión marina, hace unos 5000 años. El hallazgo fue entregado al Museo Paleontológico local, que realizará estudios para identificar la especie y preservarla en su colección.
Un hallazgo paleontológico sorprendente
Un turista pescador, Juan Cruz Roldán, descubrió una gran vértebra en la costa del riacho local mientras disfrutaba de su estadía en San Pedro. El bajo nivel del agua dejó al descubierto antiguos sedimentos, donde se encontraba enterrada esta pieza fósil de gran valor científico.
Restos marinos en tierra firme
El hallazgo se relaciona con la última ingresión marina, un período geológico en el que el mar avanzó sobre zonas que hoy son tierra firme. Este fenómeno permitió que animales marinos quedaran atrapados en el sedimento, dejando restos que emergen miles de años después gracias a erosiones o bajantes del río.
¿Un rorcual común?
Desde el Museo Paleontológico de San Pedro, institución que ahora analiza la pieza, estiman que podría tratarse de un ejemplar de Balaenoptera physalus, conocido como rorcual común. Este cetáceo puede alcanzar los 18 metros de largo y tiene una distintiva aleta dorsal cercana a la cola.
Un nuevo tesoro para el museo
La vértebra será incorporada a la colección del Museo Paleontológico de San Pedro, donde será estudiada en profundidad y eventualmente exhibida. La institución agradeció a Roldán y su familia por la colaboración, destacando la importancia de preservar y compartir estos hallazgos con la comunidad.