Mire doña, acá usted lo ve a Omarcito Pacini, nuestro lord mayor comunal, cuando se entregaron los premios de la Doble Bragado en plena Avenida de Mayo. Y claro, queda bajito al lado de los muchachos que están en el podio. Eso le diríamos que es natural. Pero mire si será chiquito, que aparece ayer en LA OPINION en una foto con el sacerdote de la Iglesia de la Merced entregando un subsidio y el cura que es altísimo, también parecía estar subido al podio. Con unas buenas plataformas debajo de pantalones de ruedo bien bajo para ocultarlas, daría otra altura doña y eso da más presencia. De todas maneras Omar tiene lo suyo, aunque no sea la altura doña, ya se sabe que los petisos son más bravos y a veces más despiertos.
Pero bueno, si marcha como intendente lo dejaremos seguir usando los zapatos de siempre, no nos vamos a andar fijando en esas pequeñeces doña.
NO VAN A APRENDER MAS
No aprenden más nuestros políticos doña, es un año electoral y tampoco toman nota de estos detalles. El viernes el diario LA OPINION cumplió 98 años de vida, nada menos.
Omar Pacini tuvo la delicadeza de enviar una carta, no es comestible, pero pasa. La única que se acordó de llevar unas empanadas fue Rosita Tulio. Los demás, minga, doña, ni una gaseosa, una docena de facturas, un pan casero, unos triplines de miga, unas pizzas. Pero no hubo nada.
La miserabilidad de nuestros políticos, conocidos devotos de la Virgen del Codo ya es legendaria, no meten la mano en el bolsillo para comprar unos pastelitos, porque salen con los bolsillos cosidos por si se tientan.
No importa Tota, nosotros tenemos el cuero duro y vamos a aguantar el sogazo, pero sepa que tenemos memoria bien larga y le decimos, la única posibilidad que tienen de reivindicarse es para el Día del Periodista. Como es recién en junio, habrá que esperar, pero mientras tanto vendetta, al mejor estilo tano.
APRENDER CHAMAME
Mire doña que el Cachirulo es ocurrente, nos contó un colega y amigo que anda pontificando en marzo se viene el chamamé. Se imagina doña que todos los radicales y aliados andan practicando el baile litoraleño, por si el Cachirulo los cabecea y los saca a bailar. Cuántos están esperando ese cabeceo.
Aunque parece que va a terminar bailando con Omar Pacini, que terminará yendo por la reelección. El problema es que el Cachirulo responde a Julio Cobos y Omarcito a Sanz. No sabemos cómo se zanjan estos asuntos de enjundia, pero por las dudas, todos a practicar que se viene el baile y el chamamé parece fácil pero hay que tener una cintura para bailarlo que ni le cuento.
TENSIONES EN EL AIRE
Y sí doña, en el kirchnerismo, en el sciolismo, el urybarrismo y el randazzismo local hay más tensiones, nervios e indefiniciones que arriba, para qué engañarnos. La cosa se puso dura y parece que de las Paso no se salva nadie.
Scioli va como candidato y Florencio Randazzo también, Uribarry sería su compañero de fórmula. De Scioli no sabemos quién será.
Esto complica las cuestiones en Pergamino porque las posibilidades de unidad entre los candidatos se pone difícil al no haber unidad arriba. Y si bien en marzo se definirán un poco más las cosas, por un lado quedan Lisandro Bormioli y Riky Ruggeri como K y por otro Willy Aiello y Gaby Cairat como sciolistas.
No sabemos si habrá dos listas, cuatro listas, tres listas, lo que sabemos es que se atraviesa un momento muy delicado de las negociaciones, porque arriba ninguno se baja y tampoco permiten que los de abajo lo hagan.
Una lástima tanto conflictos, pero bueno es lo que hay doña y los propios peronistas se lamentan porque saben que es la unidad lo que los hace fuertes en las generales, porque en las Paso, gana uno y después los otros no acompañan, eso se ha visto desde que el mundo es mundo y había internas cerradas.
Dicho esto sin entrar en el candombe de lo que serán las candidaturas a gobernador de Buenos Aires. Otra novela de espionaje para pasar el verano, ya le anticipamos. Porque de acuerdo a con quién se está, sea K o sciolista, hay varios anotados en cada sector.
Y bueno doña, los radicales bailan el chamamé y los peronistas el candombe, veremos los del PRO que son más chetos, qué ritmo eligen, pero el asunto es que todos están de pura milonga.
