martes 13 de mayo de 2025

Según Illia, se extraen cerca de 54 millones de litros de agua por día

25 de septiembre de 2016 - 00:00

Tomando como referencia los habitantes de la ciudad que arrojó el censo 2010, es suficiente para abastecer a dos Pergamino. Aun así, preocupa que se sigan registrando problemas de presión en algunas zonas. Esto se debería a que el consumo es exponencial en nuestra ciudad, por el derroche y también debido a pérdidas por cañerías rotas.

DE LA REDACCION. La Dirección de Obras y Servicios Sanitarios desarrolló en estos últimos meses una intensa tarea de reparación de pérdidas de agua con el fin de disminuir el alto índice de consumo que se registra en nuestra ciudad. El criterio general que se utilizó para la realización de las reparaciones fue dar prioridad a aquellas pérdidas que generan mayor cantidad de fuga de agua del sistema, razón que suele ser motivo de preocupación en el vecino, que advierte que mientras se le solicita conciencia y ahorro, ve que en las calles el agua corre sin control.

“Son trabajos sencillos de resolver pero resultan menores desde el punto de vista cuantitativo, en relación a todo el sistema. Esta Dirección recibe también reclamos por mal funcionamiento del sistema cloacal, los que por su impacto sanitario tratamos de resolver diariamente ya que son excepcionales los casos de derrames en el interior de los domicilios o en la vía pública que escapen a esta lógica”, dijo Guillermo Illia, titular del área de Servicios Públicos. “Desgraciadamente lo expresado anteriormente se altera en los días de lluvia de cierta intensidad ya que hay una cantidad importante de desagües cloacales conectados antirreglamentariamente a las cloacas, que generan cargas hidráulicas que son imposibles de transportar por la cañerías que conforman el sistema”, agregó.

- Dadas las condiciones de la red y el alto consumo que se registra ya a esta altura del año, ¿cómo están preparándose para el periodo estival teniendo en cuenta la mayor demanda?

- Para el próximo período estival, preocupación que insistentemente nos trasladó el intendente Javier Martínez, se tomaron previsiones que creemos que garantizarán la provisión normal; en este sentido se repararon y adquirieron bombas para las distintas potencias esperando no nos lleven a la situación que tuvimos que afrontar el año pasado cuando iniciamos la gestión. 

Durante este ejercicio contamos con cinco nuevas perforaciones, tres financiadas por el Municipio, y dos por emprendimientos urbanísticos, lo que representará un incremento del orden del 10 por ciento en el nivel de producción. Estamos realizando un relevamiento en desagües pluviales y en bocas de registro con el propósito de detectar posibles fugas, que no son advertidas en superficie, y provocan una disminución de la presión en la red de distribución que tienen impacto local, zonal o general en función de su magnitud.

Un capítulo aparte merece el generar conciencia en la población con respecto al derroche de agua, lo que provoca en determinadas épocas picos de consumo que nos hacen faltar presión en algunas zonas de la ciudad. En este sentido afirmamos que la cantidad de agua que se distribuye es suficiente para todos, si hacemos un uso responsable. 

Nos lleva a tal afirmación saber que la Dirección de Obras y Servicios Sanitarios, a partir de los 54 pozos o perforaciones existentes, la producción alcanza alrededor de 54 millones de litros diarios de agua, suficientes para abastecer con holgura una población de 200.000 habitantes (superior al doble de la población servida actualmente) lo que significa que la producción per cápita sobrepasa los 550 litros diarios, lo cual excede en más del doble de lo que debiera ser un valor normal. 

 

Problema de conciencia 

La falta de presión en la red de distribución en determinados momentos (aun con el sistema en pleno funcionamiento) demuestra que el consumo real supera a la producción del recurso. “Estamos en presencia de consumos extraordinarios, que no requieren más medidas que la del control, que trataremos que sea por propia conciencia del vecino sin tener que recurrir a medidas sancionatorias por parte del Municipio”, indicó Illia. Apelando al autocontrol del vecino, el funcionario está descartando que se esté considerando la instalación de medidores y el cobro del servicio por consumo, algo que la anterior gestión sí intentó hacer, con la certeza de que, al tener que pagar, la gente reduciría drásticamente el derroche. 

Ante la excesiva demanda que en gran parte del día supera la disponibilidad del recurso, la respuesta del sistema se traduce en una disminución de presión en las redes de distribución, resultando más críticos aquellos lugares elevados del punto de vista topográfico u otros con alta densidad poblacional. 

A pesar de las permanentes recomendaciones que se realizan a través de las campañas de concientización, con respecto a la utilización responsable del agua, en época estival se reitera una conducta insolidaria, que se traduce en acciones diversas que impactan directamente en el sistema: el riego de espacios verdes, el llenado de piletas, la falta de tratamientos en natatorios para sanear el agua, lavado de veredas, de automóviles o riego de calles, entre otras cosas.

“Si bien se incorporan nuevas perforaciones al sistema, desde la Dirección compartimos  un criterio con diferentes áreas municipales dado que la prioridad no es aumentar los niveles de generación, que consideramos absolutamente suficientes, sino continuar sacando de servicio o disminuyéndolos horarios de bombeo de las perforaciones más antiguas”, resaltó Guillermo Illia. “Este criterio se hace con la idea de preservar la única fuente de abastecimiento de agua de la ciudad mediante este recurso hídrico subterráneo, por lo que actuar en contrario sería irresponsable e irracional”, concluyó el funcionario. 

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