El conflicto se inició en marzo y derivó en una denuncia formal. La joven afirma que realizó varios pagos por los arreglos, pero el mecánico se niega a entregarle el rodado. Investigan un posible incumplimiento contractual.
Foto ilustrativa del mecánico.
Un nuevo conflicto entre cliente y taller mecánico llegó a la justicia en San Nicolás. Esta vez, la denunciante es una joven de 22 años que afirma haber sido víctima de un incumplimiento por parte del responsable de un taller ubicado en calle Balcarce al 750.
Según consta en la denuncia, el mecánico se niega a devolverle su moto, pese a que ya realizó los pagos correspondientes por la reparación.
El vehículo en cuestión es una Brava Texana HS 200 de color negro, que fue ingresado al taller el pasado 8 de marzo para una serie de arreglos mecánicos. La joven asegura haber abonado varias sumas por los trabajos realizados, pero al momento de solicitar la entrega del rodado, el responsable del taller se negó sin brindar explicaciones convincentes.
La situación se tornó insostenible luego de varias semanas de reclamos sin respuesta. Ante la negativa persistente, la propietaria de la moto presentó una denuncia formal el martes 3 de junio, buscando recuperar su bien y evitar eventuales daños o perjuicios.
El caso quedó caratulado como “Incumplimiento de contrato de reparación”, una figura que refiere a conflictos civiles-comerciales cuando una de las partes no cumple con lo pactado. Aunque no se trata de un delito penal en sí mismo, la intervención judicial busca resolver el conflicto de fondo y proteger los derechos de la parte damnificada.
Además del reclamo formal, la joven expresó su malestar en redes sociales, advirtiendo a otros usuarios sobre el taller en cuestión. Si bien no trascendió el nombre del mecánico, el taller fue identificado por su ubicación.
Desde el entorno legal de la denunciante señalaron que “se espera una pronta resolución para evitar una escalada del conflicto y garantizar la restitución del rodado”.
El caso reabre el debate sobre la regulación de los talleres mecánicos, un sector que muchas veces funciona sin controles claros, y donde los reclamos por demoras o incumplimientos se multiplican.