El martes pasado, un episodio inusual alteró la rutina escolar en el paraje Francisco Ayerza, en jurisdicción de Pergamino. Una avioneta sobrevoló las cercanías del edificio donde funcionan la Escuela Primaria N° 56 y la Secundaria N° 3061 (anexo de la Secundaria 6), en un sector rural habitado por varias familias.
El vuelo encendió la alarma en la comunidad educativa, ya que en la ciudad rige una orden judicial que prohíbe aplicaciones aéreas a menos de 3.000 metros de viviendas y edificios escolares, además de fijar restricciones para las aplicaciones terrestres a menos de 1.049 metros.
Según detallaron directivos y docentes, el paso de la aeronave fue advertido por algunas de las personas de la comunidad educativa porque hubo quienes, ni lo escucharon ni lo vieron; según las declaraciones del último viernes, lo que motivó la inmediata denuncia ante las autoridades.
Algunas personas manifestaron dolencias físicas posteriores y al menos ocho fueron atendidas en la guardia del Hospital “San José”, donde recibieron tratamiento preventivo y controles médicos, sin que fuera necesaria ninguna internación.
El fiscal Daniel Aguilar, titular de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio N° 6, tomó intervención directa en el caso y se hizo presente en el centro de salud para recabar información sobre la asistencia médica brindada.
Aguilar dispuso la actuación de la Brigada de la Policía Ecológica, con asiento en Junín y competencia sobre Pergamino, que llevó a cabo un muestreo en el predio escolar y sus alrededores, incluyendo el patio, el jardín delantero, la vereda y sectores linderos.
En paralelo, el Destacamento Policial de Acevedo fue instruido para recolectar testimonios que permitan identificar con precisión a la aeronave involucrada. Un peón rural que lo vio a diez kilómetros de distancia del lugar -está el testimonio en la causa- dijo que sería amarillo y de los otros testigos ninguno vio el color del avión.
Lo que orientó la investigación hacia un tipo de aeronave monoplaza comúnmente utilizado en la zona para aplicaciones agrícolas.
Ante esa descripción, efectivos policiales inspeccionaron un campo donde estaba guardada una avioneta de similares características.
El propietario de ese predio agrícola, junto a su abogado defensor, y por intermedio del letrado, se comunicaron en forma inmediata con el fiscal Daniel Aguilar y se pusieron a disposición de la justicia, colaborando desde ese momento con la investigación, aportando la receta agronómica, entregaron muestras de residuos del tanque del avión y un bidón del producto aplicado en el campo que habían trabajado en esa jornada.
La avioneta
La avioneta estuvo siempre guardada sin quedar secuestrada y no se allanó el campo, sino que el propietario con el abogado aportaron los elementos necesarios para la investigación judicial.
El abogado defensor del productor agropecuario propietario del avión, Aquilino Giacomelli, se presentó en la causa y aportó documentación que, según afirmó, deslinda de responsabilidades a su cliente.
Entre los elementos entregados figuran coordenadas de geolocalización del lote en el que se habría trabajado ese día, que situarían la aplicación a mayor distancia de la escuela, además de la receta agronómica del producto utilizado, clasificado como de bajo riesgo.
De todos modos, la Fiscalía avanza en la recolección de pruebas y mantiene abierta la investigación. En la jornada de este viernes declararon en sede judicial docentes, directivos y personal de la escuela que fueron testigos del episodio.
El objetivo de los investigadores es reunir la mayor cantidad de testimonios y elementos técnicos que permitan determinar si efectivamente se incumplieron las disposiciones judiciales vigentes sobre aplicaciones aéreas y si se produjeron afectaciones a la salud de la comunidad educativa.
El hecho reavivó la preocupación en torno a las fumigaciones en zonas rurales con presencia de establecimientos escolares y viviendas familiares. Se trata de una problemática que desde hace años es objeto de debates, medidas cautelares y procesos judiciales en Pergamino y la región, donde las comunidades reclaman que se cumpla el fallo vigente para evitar riesgos sanitarios.
Actualidad del caso
Este viernes en la sede de la Fiscalía se recibieron seis declaraciones testimoniales y entre este lunes y los martes seguirán tomando el resto de las declaraciones de testigos que no pudieron concurrir aún. Hasta el momento lo que surge de las actuaciones es que sólo escucharon ruido de la avioneta. Ninguno la vio. Y el único video que consta en la causa no habría sido grabado desde las instalaciones escolares o sus inmediaciones.
Para el fiscal Daniel Aguilar la instrucción judicial se encuentra en los albores con la producción de pruebas inicial. La semana que viene en el expediente van a incorporar los resultados del análisis del material secuestrado en el lugar por los especialistas de Policía Ambiental que dejará determinado si cayó algún funguicida en el espacio escolar.
¿Policía Federal?
La intervención de la Policía Federal en la escuela de Ayerza es una cuestión que está indagando el abogado Aquilino Giacomelli.
El letrado sostiene que surge de la causa que ante las declaraciones del personal docente, solicitó un pedido de informes a la Policía Federal Local para que indiquen que personal de policía concurrió al lugar ese día y a esa hora, ya que la Justicia nunca lo ordenó y ningún personal docente los convocó, ya que llamaron al 911 de la Policía Bonaerense. Además, desde la defensa de Giacomelli solicitaron a la Fiscalía que se requiera al radar meteorológico del INTA local informe la dirección y velocidad del viento durante esa jornada en el campo aplicado y la escuela.