En la jornada de este viernes se desarrolló una intensa audiencia de juicio en la sala del Tribunal Oral en lo Criminal de Pergamino, donde el juez Ignacio Uthurry encabezó el debate contra un hombre acusado de participar en un violento robo cometido en febrero de 2024 en un supermercado chino del barrio José Hernández.
La instancia avanzó hacia su tramo final con los alegatos de cierre, en los que las partes mantuvieron posiciones completamente opuestas sobre la responsabilidad penal del imputado.
El fiscal Germán Guidi solicitó al magistrado que imponga una pena de 12 años de prisión, al considerar acreditado “más allá de toda duda razonable” que el acusado actuó como coautor del robo agravado por el uso de un arma impropia. En una exposición extensa y minuciosa, Guidi sostuvo que la prueba producida en el debate permitió reconstruir con claridad la secuencia delictiva y ratificar la intervención de dos sujetos que irrumpieron la mañana del martes 13 de febrero de 2024 en el comercio “Thiago”, propiedad de un ciudadano de nacionalidad china, ubicado en Colodrero al 1040.
Asalto violento
Según la acusación, aquel martes 13 de febrero del año pasado, alrededor de las 10:35, dos individuos ingresaron al local con el propósito de apoderarse de la recaudación. Uno de ellos habría intentado sustraer el dinero directamente de la caja registradora mientras la víctima se resistía, originando un forcejeo. En ese contexto, el otro sujeto —identificado por la fiscalía— golpeó por la espalda al comerciante con un caño de gas de color amarillo, logrando así vencer su defensa. Con la víctima reducida, ambos escaparon con aproximadamente 200 mil pesos en efectivo a bordo de una motocicleta Guerrero Trip 110 negra, sin plásticos en la zona frontal.
Durante el alegato, Guidi repasó uno a uno los elementos probatorios reunidos: el testimonio de la víctima, la declaración de los oficiales que intervinieron en la investigación y la reproducción de la filmación de las cámaras de seguridad que captaron el hecho. También destacó el allanamiento realizado en un domicilio de calle Mazzei al 1100, donde se secuestraron prendas de vestir, una mochila, una gorra y el caño de gas presuntamente utilizado, cuyas características —según la fiscalía— coinciden de manera contundente con los objetos observados en las imágenes del robo.
El representante del Ministerio Público subrayó además el reconocimiento efectuado por personal policial al analizar las filmaciones, la relación entre los imputados y la persona a cuyo nombre estaba la motocicleta utilizada, y la coincidencia física entre los individuos registrados en video y los acusados. “Se trata de un hecho claro, sin grises, en el que la prueba de cargo fractura el principio de inocencia”, expresó Guidi, al remarcar la existencia de múltiples indicios convergentes y comparativos que, a su criterio, no dejan margen a una hipótesis alternativa.
En línea con esto, el fiscal evaluó los antecedentes de ambos imputados y la violencia ejercida contra la víctima como agravantes relevantes, así como la participación conjunta y el uso de la motocicleta para facilitar la fuga. Por todo ello, reclamó que el acusado sea condenado como coautor de robo agravado por el uso de arma, figura prevista en el artículo 166 inciso 2° del Código Penal.
Por su parte, el abogado defensor Rodrigo Cuellar Aliaga sostuvo una postura diametralmente opuesta. En su exposición pidió al juez la absolución, al considerar que la imputación carece del sustento probatorio necesario para alcanzar el estándar de certeza exigido en esta etapa procesal. Para la defensa, las pruebas presentadas no logran vincular de manera inequívoca a su asistido con el robo, y planteó que persisten dudas que deben resolverse en favor del acusado.
Tras escuchar a las partes, el juez Uthurry dio por concluida la ronda de alegatos y pasó a deliberar. El veredicto será dado a conocer en los próximos días.