Un barco con casi 3000 vacas procedentes de Uruguay lleva más de 50 días varado frente al puerto de Bandirma, en Turquía, en condiciones que organizaciones animalistas califican como “inhumanas y peligrosas”. Las ONG denuncian que ya murieron al menos 48 animales y advierten que el resto podría no sobrevivir al viaje de regreso.
La crisis humanitaria y sanitaria que atraviesa el carguero Spiridon II tomó un giro alarmante luego de que organizaciones de protección animal internacional denunciaran el “abandono extremo” en el que se encuentran casi 3000 vacas exportadas desde Uruguay. El buque permanece retenido frente al puerto de Bandirma, Turquía, desde el 21 de octubre, sin autorización para desembarcar la carga.
Las ONG advierten que los animales llevan más de 50 días encerrados en un navío que, según múltiples inspecciones previas, presenta graves deficiencias estructurales, fallas de seguridad y condiciones insalubres. La Fundación para el Bienestar Animal (AWF) y la organización francesa Robin des Bois confirmaron que al menos 48 animales ya murieron, y alertan que el número podría aumentar durante el viaje de regreso hacia Montevideo por falta de alimento y deterioro físico extremo.
Turquía acusa falta de certificados; Uruguay habla de un conflicto comercial
El gobierno turco afirmó que la carga fue rechazada por irregularidades en la documentación sanitaria y comercial, asegurando que casi 500 animales no coincidían con las listas y que otros ni siquiera tenían chips de identificación.
Sin embargo, Uruguay niega esa versión. El director de Servicios Ganaderos, Marcelo Rodríguez, sostuvo que no existe ningún problema sanitario, y que el conflicto responde a un desacuerdo comercial entre exportador e importador sobre qué animales debían ser embarcados.
Un barco con historial cuestionado
El Spiridon II, de bandera de Togo, pertenece a la compañía Murr Shipping y ya había sido demorado en países como Líbano, Croacia, Eslovenia, Brasil o España.
Según AWF, acumula 76 deficiencias registradas, entre fallas en la protección contra incendios, problemas estructurales y condiciones inapropiadas para el transporte de ganado vivo.
ONG exigen desembarco inmediato
Las organizaciones denuncian que los animales permanecen hacinados, sin ventilación adecuada y con suministro de alimento limitado. “La situación es insostenible. Cada día que pasa aumenta el sufrimiento y disminuye la probabilidad de supervivencia”, advirtió AWF.
El barco ya inició el regreso a Uruguay
Tras la reunión fallida entre autoridades uruguayas y turcas, el buque recibió la instrucción de volver a Montevideo. Especialistas temen que una parte significativa del ganado no llegue con vida, debido al desgaste físico y al prolongado confinamiento.
La situación reabrió el debate sobre las exportaciones de animales vivos, una práctica cuestionada en todo el mundo por sus altos niveles de sufrimiento y los riesgos sanitarios que implica.