El Senado de la Provincia de Buenos Aires no logró sesionar para tratar el proyecto kirchnerista que buscaba habilitar la reelección indefinida de legisladores, concejales y consejeros escolares. El PRO, la UCR y parte de La Libertad Avanza no bajaron al recinto.
Sin quórum
En una jornada marcada por el ausentismo y los mensajes cruzados, la segunda sesión ordinaria del Senado bonaerense terminó sin el tratamiento del proyecto que proponía habilitar las reelecciones indefinidas de cargos legislativos en la provincia de Buenos Aires. La falta de quórum, provocada por la ausencia de los bloques del PRO, la UCR y un sector de La Libertad Avanza, dejó sin efecto la posibilidad de debatir una de las iniciativas más sensibles del cristinismo en la antesala de las elecciones del 7 de septiembre.
El texto en cuestión —redactado por el senador kirchnerista Luis Vivona— proponía eliminar el límite actual de dos mandatos consecutivos para legisladores provinciales, concejales y consejeros escolares. La idea era avanzar hacia un régimen similar al que rige a nivel nacional, donde no hay topes para la reelección.
Una sesión trunca y un nuevo revés para el oficialismo
Tras aprobar una serie de pliegos judiciales, la Cámara Alta quedó sin margen para avanzar con los temas políticos más calientes. Entre los bloques que sí asistieron al recinto se encontraron Unión por la Patria y Unión, Renovación y Fe, aunque con ausencias clave como las de Sofía Vanelli (Frente Renovador) y Federico Fagioli (Patria Grande), ambos críticos del proyecto.
“Lamento que no podamos debatir un tema de interés político y social como este. Se pierde una oportunidad de dar una discusión de cara a la ciudadanía”, expresó desde el recinto la senadora Teresa García, jefa del bloque oficialista.
En la misma línea, Carlos Kikuchi —del bloque Unión, Renovación y Fe— reclamó que “los legisladores somos servidores públicos y nuestro trabajo es venir a debatir todos los temas del orden del día. No solo la reelección”.
El comunicado del PRO
Internas, disidencias y tensiones cruzadas
El debate por las “re-re” expuso con crudeza las tensiones internas dentro del peronismo bonaerense. Mientras el kirchnerismo impulsaba con fuerza el proyecto de Vivona, el sector alineado con Axel Kicillof respaldaba una iniciativa distinta, presentada por la senadora Ayelén Durán, que también incluía la reelección indefinida de los intendentes. Esta última no fue tratada por falta de despacho de comisión y requería dos tercios para su debate.
Durán, junto a los senadores Pedro Borghini y Sabrina Bastida, manifestó reparos hacia la propuesta original del cristinismo. “La política necesita más renovación, no menos. Quienes votan a favor de eliminar los límites no representan a la gente, se representan a sí mismos”, expresó la legisladora en sus redes sociales.
Desde el PRO y la UCR, la postura fue clara: no dar quórum para habilitar una discusión que consideran “regresiva” y contraria a la renovación política. Aunque hubo excepciones, como la del platense Marcelo “Chuby” Leguizamón, que expresó su apoyo al proyecto pero votó en contra “para mantener la unidad del bloque”.
Lo mismo ocurrió en el bloque UCR–Cambio Federal, donde los senadores Alejandro Cellillo y Marcelo Daletto se desmarcaron y se mostraron a favor de la propuesta kirchnerista.