Tras una serie de allanamientos que se concentraron en la zona donde se produjo el crimen, fue aprehendido uno de los partícipes del hecho, en tanto que los dos restantes siguen prófugos. Se secuestró la moto que habría sido utilizada por los atacantes, pero no pudieron dar con el arma. El fiscal brindó detalles de la causa en una entrevista a LA OPINION.
DE LA REDACCION. Más de 50 efectivos pertenecientes a la DDI, Infantería, Comando de Patrullas y Comando de Prevención Rural, encabezados por el fiscal Nelson Mastorchio, llevaron a cabo en la madrugada de ayer seis allanamientos simultáneos en el barrio Martín Güemes, en el marco de la investigación por el homicidio de la adolescente de 13 años, Loana Roberto.
Los investigadores llevaban las órdenes de detención para los tres sujetos que fueron identificados por los vecinos y familiares de la víctima como los autores del ataque que terminó con la vida de la menor.
Uno de ellos fue aprehendido en una vivienda de calle Román al 1600, donde se secuestró una moto similar a la que se movilizaban los atacantes al momento de cometer el hecho. También se incautaron de 11 bombas incendiarias de fabricación caseras y otros elementos de interés para la causa.
Los otros dos sujetos involucrados en el brutal ataque, entre ellos el principal imputado, identificado por la madre de la víctima como Mortadela, continúan prófugos y tampoco fue posible dar con el arma utilizada. El fiscal solicitó nuevas órdenes de allanamiento para dar con los dos individuos, aunque no se descarta que los mismos se presenten espontáneamente ante la Justicia, teniendo en cuenta que abogados particulares habrían solicitado el expediente para interiorizarse sobre la causa.
Allanamientos
El megaoperativo se puso en marcha alrededor de las 6:30 de ayer encabezado por el propio fiscal Mastorchio junto a los instructores Juan Fontana y Sebastián Labate y el jefe de la DDI comisario mayor Jorge Eduardo Vera.
Unos 55 efectivos en 12 vehículos llegaron hasta la intersección de Nicaragua y Román para efectivizar seis allanamientos, junto a un séptimo que se realizó en un domicilio de Jorge Newbery al 2100 del barrio 24 de Septiembre.
En una de las viviendas fue aprehendido un sujeto de 31 años, sindicado como uno de los autores del hecho, en tanto que los dos restantes no fueron hallados. Mañana (por hoy) se va a insertar el pedido de captura nacional e internacional para los otros dos imputados, confirmó el fiscal Mastorchio a LA OPINION.
El funcionario señaló además que en la vivienda del único detenido se secuestró la moto en la que posiblemente se movilizaban al momento del hecho. También se hallaron en dos domicilios un total de 11 bombas molotov caseras hechas con botellas de vidrio, nafta y una mecha, listas para ser arrojadas.
Coautores
Los tres imputados son personas con frondosos antecedentes por robos, uso de armas y venta de estupefacientes, uno de los cuales salió de prisión en enero de este año.
El fiscal tiene atestiguado con declaraciones sin reserva de identidad, sino con testimonios directos, que uno de ellos iba con el arma, otro conducía la moto y el tercero los acompañaba.
Hasta el momento los tres imputados son considerados coautores por el fiscal ya que existía una problemática previa. No ocurrió que circunstancialmente los tres salieron a pasear en moto y uno de ellos extrajo el arma y decidió disparar. Al único que le puede llegar a caber un atenuante, participación secundaria o primaria es al que acompañaba, pero tanto el que manejaba como el que disparó son sin duda coautores.
A matar
LA OPINION consultó con el fiscal de la causa si a su entender la balacera fue contra el frente de la vivienda o directamente al cuerpo de la menor, Mastorchio señaló que la chica estaba parada en la puerta de la casa, por lo que a esta altura no me cabe ninguna duda que dispararon hacia la menor y estamos tratando de determinar si la víctima estaba junto a otra chica del barrio.
Hipótesis
Con respecto al origen del conflicto que terminó con la vida de la joven, el fiscal reconoció que manejan dos hipótesis: una de ellas es la escalada de violencia que se originó el sábado entre el hermano de la menor fallecida y uno de los imputados, lo que derivó en los enfrentamientos del domingo en el que fue aprehendido el mismo joven hermano de la adolescente y que luego termina con la muerte de la chica; la otra hipótesis, luego de trabajar en el lugar del hecho y hablar con los vecinos de la zona -quienes tienen miedo de declarar- no descartamos que más allá de esta escalada de violencia, esto haya sido una lucha de territorio para la venta de droga al menudeo, pero esto no lo tengo certificado. En dos de los domicilios que allanamos nos hicieron referencia de que allí vendían droga, señaló el fiscal.
La carátula de la causa es homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego y prevé una pena de 10 a 35 años.