Concejales del PJ y el socialismo impulsaron un proyecto para suspender cobros irregulares por agua y cloacas. El gobierno de Marcelo Matzkin lo bloqueó por mayoría. La iniciativa surgió a raíz de los serios problemas administrativos y comunicacionales registrados desde enero
Debate en Zárate
En un clima de creciente malestar vecinal, el Concejo Deliberante de Zárate rechazó una propuesta de la oposición que buscaba suspender el cobro de la Tasa por Servicio de Agua y Cloacas correspondiente a los primeros cuatro meses del año. El proyecto había sido presentado por el bloque del PJ y acompañado por el Bloque Socialista, pero fue desestimado por la mayoría oficialista que responde al intendente Marcelo Matzkin.
Iniciativa del bloque kirchnerista
La iniciativa surgió a raíz de los serios problemas administrativos y comunicacionales registrados desde enero, cuando se comenzaron a emitir boletas con aumentos superiores al 500%. Durante semanas, los vecinos no recibieron facturas, no se establecieron canales de pago claros y ni siquiera hubo una notificación formal de la vigencia del nuevo tributo. La primera comunicación oficial recién llegó en marzo, cuando muchos ya acumulaban deudas impagas.
“Lo que proponíamos era simple y justo: suspender el cobro hasta que el sistema esté en condiciones de funcionar correctamente. No puede ser que los errores del Ejecutivo siempre los termine pagando la gente”, explicó el concejal Leandro Matilla, impulsor del proyecto.
La oposición denuncia censura política y favoritismo fiscal
Desde el PJ señalaron que el rechazo no respondió a cuestiones técnicas, sino a una decisión política del oficialismo de bloquear toda propuesta que no provenga del Ejecutivo. “La mayoría oficialista se limita a ser servicial con un Ejecutivo que siempre va detrás de los problemas. No escucha, no planifica y descarga los costos sobre los que menos tienen”, afirmaron desde la bancada opositora.
El concejal Matilla también denunció una política fiscal desigual: “En Zárate se construyen casas de 500 metros cuadrados sin pagar el derecho de construcción. Hay empresas que no pagan lo que deben. Pero a los vecinos no se les perdona ni una boleta, aunque no se las hayan entregado”.
El rechazo al proyecto confirma, según la oposición, que el gobierno local prioriza la recaudación por sobre la justicia tributaria y el bienestar ciudadano. “La improvisación, la falta de transparencia y el desinterés por las realidades cotidianas de los vecinos definen esta gestión”, concluyó Matilla.