Después de días de especulación en torno a la medida de fuerza anunciada a nivel nacional, la UTA confirmó que no se sumará al paro convocado para el próximo miércoles, garantizando el servicio de transporte en Pergamino. "No entendemos cuál es el sentido del paro", indicaron fuentes sindicales, argumentando que el foco de su conflicto se centra en la negociación paritaria con los empresarios y no en un reclamo hacia el gobierno nacional.
Este lunes, representantes de la UTA se reunieron en la Secretaría de Trabajo para continuar las discusiones salariales, una mesa de negociación que han priorizado y que consideran clave para obtener mejoras laborales para los choferes de colectivos. En ese contexto, desde el gremio subrayaron que su reclamo debe dirigirse a los empresarios, quienes son los responsables directos de sus condiciones laborales.
El paro convocado por los demás gremios del transporte a nivel nacional tiene como objetivo manifestarse en contra de las políticas del gobierno de Javier Milei. La huelga afectará a otros sectores como los subtes, trenes, y aeronáuticos, y representa una medida contundente por parte de trabajadores del transporte que son empleados directos del Estado o están vinculados a decisiones gubernamentales.
En ese sentido, la UTA aclaró que no considera justificada su participación en esta huelga, dado que sus condiciones laborales y paritarias dependen de acuerdos con el sector empresarial privado. "No somos trabajadores estatales. A nosotros, son los empresarios los que nos tienen que dar respuestas", afirmaron voceros del sindicato.
Si bien la UTA apoya los reclamos por mejoras laborales y salariales, sostuvieron que su actual estrategia está centrada en el diálogo con los empleadores, buscando alcanzar un acuerdo favorable en un marco de negociación directa. Esta posición los ha llevado a evitar una medida de fuerza que afectaría a miles de pasajeros en Pergamino y otras localidades.