A cinco años de la desaparición física de Capora, fallecido el 30 de junio de 2013, sus excolegas del arbitraje colocaron una placa en el cementerio donde descansan sus restos. Participó la familia del réferi y otras personalidades del fútbol pergaminense.
Un emotivo momento vivió este sábado por la tarde el referato del fútbol de Pergamino y la familia del fallecido árbitro Daniel Caporalini. A cinco años de su desaparición física y tal como estaba programado, el Sindicato de Arbitros de la República Argentina delegación local (Sadra) le realizó un homenaje al réferi que perdió la vida mientras dirigía un partido, al colocar en el cementerio donde descansan sus restos una placa en su memoria que fue descubierta por sus dos hijas.
El primero de los dos eventos organizados por los excolegas de Caporalini se llevó a cabo a las 16:00 en el cementerio local. Además de la presencia de los jueces que siguen impartiendo justicia en el campeonato pergaminense y de los exréferis que también participaron de este importante acontecimiento, asistieron otras personas vinculadas con esta actividad local y Susana (esposa de Caporalini) junto a sus dos hijas, que luego acapararon todas las miradas cuando descubrieron la placa en reconocimiento de su padre, un buen árbitro pero sobre todo una excelente persona.
Antes del momento más esperado de la tarde asumió la palabra Raúl Merlino, titular del Sadra Pergamino, que señaló: “Me gustaría que lo recordemos con alegría, como fue Daniel toda su vida. Es un momento para estar del lado de su familia y acompañarla”. Y luego, fue Susana la que agradeció la asistencia de los presentes. Posteriormente fueron las hijas de Caporalini las que retiraron la tela para descubrir la placa.
Luego y como cada año, se realizó una misa en su memoria en la Iglesia Merced en la que participaron familiares, amigos y excolegas del referato pergaminense.
Una pérdida considerable
Para sus compañeros del arbitraje, las autoridades de la Liga y los jugadores que tenían el agrado de ser dirigidos cada fin de semana por “Capora”, indudablemente la tarde del domingo 30 de junio de 2013 fue quizás una de las más tristes y que pegó fuerte en el fútbol de nuestra ciudad. Ese día, en pleno partido entre El Socorro y Juventud Obrera de Manuel Ocampo, que se disputó en el estadio “‘Cacho’ Fierro” del tricolor en el marco del clásico correspondiente a la fecha 13 del certamen, el réferi, de 42 años, se desplomó en el campo de juego producto de un paro cardiorrespiratorio y pese a los intentos de reanimación, no se pudo evitar la pérdida de la vida de un gran árbitro que con su experiencia y manejo de los partidos le marcaba el camino a los más jóvenes.