¡Qué noche doña en La Casa de la Cultura y su 20º aniversario! Cantó Raúl Lavié y hubo discursos, plaquetas y flores. Pero claro, también cuchicheo de los políticos, ¿cuándo no? Es que los eventos sociales son el momento justo para el chisme de paso, sin las responsabilidades de una reunión que podría comprometerlos. En estos ámbitos se charletea libremente y a nadie llama la atención. Y muchas veces de estas conversaciones casuales salen algunas decisiones ¿vió?
Y acá los tiene doña a Chelo Pacífico y Omarcito Pacini dándole a la lengua de lo lindo. Pero fíjese (porque a nosotros no se nos pasa nada Tota) la caripela del intendente Javi Martínez. Parece que al jefe comunal, hombre de acción al fin y al cabo, el tejido rococó de la política lo aburre doña y así lo vemos mirando al cielo como orando que arranque de una vez el acto y empiece a cantar el tanguero
Y AHORA?
Cómo habrá visto doña, la interna radical ya está en la calle, Juan Manuel Batallánez versus Fabito Albuerne o Pablito Mazzei. Pero esto es lo formal, detrás de la cortina están las desavenencias de Cachirulo con Javi, porque cualquiera sabe que el diputado y el intendente casi ni se hablan.
Y las acusaciones van y vienen. Esta semana que dejamos, mientras los cachirulos señalan a los macristas como los fogoneros de la lista de Batallánez, opuesta a la de ellos en la interna radical; en el Departamento Ejecutivo aseguran que la movida por el sueldo del intendente, donde dieron a conocer el salario bruto sin los descuentos para que la gente se sorprendiera por el monto que cobra, fue una movida del cachirulismo.
Así las cosas doña, se señalan unos a otros, culpándose mutuamente, en una pelea que terminará (lo de terminar es una manera de decir) tras los resultados de la interna radical, y ahí veremos quién gana.
Si ganan los cachirulos el lío sigue doña, porque en lo que hace a las relaciones con el PRO el aire se corta con un cuchillo. Si ganan los batallanistas los problemas apenas se aquietarían, ya que los muchachos son más permeables al macrismo que los cachistas.
En fin, los radicales si no hacen internas no viven y el PRO quiera que no (quiere en realidad) está en el medio.
El resultado de esta contienda aún está por verse doña
LOS PRO
Y sí doña, se armó la mesa oficial del PRO en la provincia de Buenos Aires que preside la mismísima María Eugenia Vidal. Por Pergamino la integran el lord mayor pergaminense Javi Martinez y por la segunda sección el diputado macrista Cone Yans.
Pero no se crea que lo dejaron afuera al Chelo Pacífico, el senador fue invitado a formar parte. Pero el dirigente, pata peronista del PRO, prefirió seguir siendo de Cambiemos y mantener su sello cívico local Diálogo Pergaminense.
Le preguntamos a Chelo cómo fue el asunto y nos confirmó que la situación fue tal cual se la contamos doña y agregó que él siente que aporta más a Cambiemos en el frente que han formado que sumándose al PRO puro.
Las cosas claras conservan la amistad doña y el Chelo sigue en la suya
CUMPLEAÑOS
Mire Tota, lo que uno ve en el Concejo Deliberante no lo ve en todos lados, qué quiere que le digamos. La del martes pasado, sin ir más lejos, fue una sesión tensa, con chicanas y reproches de todos los colores en el recinto. De pronto vino un cuarto intermedio y allí fue todo amabilidad y risas; es que fue el cumpleaños de Rosa Tulio y había llevado sándwiches, pizzas y bebidas (nada de alcohol doña no sea mal pensada). Menos la edad, que no la larga, Rosita festeja feliz.
Es una tradición que Rosa tenga esos detalles para con sus pares y la verdad es que todos agradecían. Por lo menos así pareció al ver la forma en la que se abalanzaron sobre las bandejas, parecía que venían del desierto sin comer ni beber por varios días doña. El festejo improvisado se hizo en la presidencia, territorio de Lucio Tezón, y por un momento se olvidó que cada uno es casa cual, como dice Serrat.
Al ratito volvió a comenzar la sesión y regresaron las chicanas, los reproches y las tensiones. Parece increíble pero es cierto Tota, tal como se lo contamos acá, sin agregar ni sacar nada.
Unos genios nuestros ediles doña